Reseña, «Hwayi: A monster boy» (화이: 괴물을 삼킨 아이)

Por @Ari2PMAM para Bomba Soju

Buenas gente, aquí vengo con una película a la que le tenía muchas ganas, y de la que ya os hablé en su día cuando salió la noticia del rodaje y luego, cuando los teasers comenzaron a salir.

Bien, aquellas que seáis sensibles ya podéis dejar de leer, porque creedme, si por algo destaca esta película por su dureza y crueldad.

Nuestra historia comienza en 1992, cuando un grupo de ladrones y asesinos raptan a un niño por el que piden cien millones de wones de rescate. La familia, acepta hacer el pago, pero por desgracia, las cosas se tuercen y el niño es sentenciado a muerte por los captores… Aunque al final, el líder del grupo decide perdonarle la vida.

Pasan los años, y ese grupo, que mejor estaría colgando del palo de mesana, sigue haciendo de las suyas sin ser pillados… Pensad mal y acertaréis a la hora de saber por qué no logran echarles el guante. Que la pandilla no se libra tan solo porque son buenos.

Estos cinco hombres, si es que se les puede considerar así, resulta que criaron al niño que secuestraron, y le cambiaron el nombre, poniéndole el de un árbol, hwayi. Atentas al motivo por el que el crío acaba llamándose así.
Lo malo de haberse criado entre semejantes monstruos, sobre todo tres de ellos interpretados por Kim Yun Seok, Kim Sung Kyun y Park Hae Joon, es que decidieron que el chaval, se iniciase en el camino del latrocinio… Aunque en un principio sólo se dedica a despistar a la policía y forzar cerraduras.
Luego tenemos a los otros dos «padres», es que Hwayi (Yeo Jin Goo) los llama padres a todos, Ki Tae (Choi Jin Woong. Vuelve a hacer de woodalchi joseónico jebaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaal), que sufre una deficiencia mental, pero aun así, está siempre en todos los golpes y no para de hablar a Hwayi siempre de lo mismo (pensad mal y acertaréis), y tengo que decir que ciertas escenas me hicieron sentir incómoda.
Y tenemos al padre que puede considerarse más padre en el sentido que todas nosotras conocemos esa palabra, Jin Sung (Jang Hyun Sung). Éste se preocupa porque Hwayi pueda librarse de llevar ese tipo de vida que llevan ellos. No quiere que se convierta en un ladróny un asesino. Así que planea enviarlo al extranjero a estudiar bajo un nombre falso, y que allí haga su propia vida dejando de lado lo que había conocido.

Pero no sólo hay cinco «padres», sino que también hay una «madre»… Aunque la historia de Young Joo (Im Ji Eun), es TERRIBLE, no hay otra manera de describirla. Ella quiere muchísimo a Hwayi, lo considera su hijo, lo cuida, lo mima siempre que puede… Porque no es que goce de mucha libertad que digamos. En fin, ella y una estudiante de la que se enamora Hwayi, son las únicas personas que nos dan un momento de respiro y podemos ver escenas más relajadas, por decirlo de alguna manera.

El caso, es que este grupo recibe las órdenes de liquidar a un matrimonio porque se niegan a abandonar su casa.
Debido a este trabajo, Hwayi acaba sufriendo un trauma de los que hacen época. Y creedme, cuando os digo que el trauma es GORDO, es que lo es. Pero esto servirá para que algo dentro de él se arregle… O se rompa, según lo miréis. En mi opinión creo que se queda a medio camino por cómo va el tema.

Este trabajo de asesinar al matrimonio, hace que entren en escena un mafioso con conexiones en las altas esferas, interpretado por Moon Sung Geun, y su hombre de confianza, Park Ji Won (Yoo Yeon Seok. No hay manera de que me reconcilie con este hombre, oye). Y es que las cosas no salen tan bien como tenían planeadas… Y buena parte de la culpa de que todo se enrede la tiene Seok Tae al hacer que Hwayi se vea involucrado, porque poco después, el chaval se embarcará en un camino de venganza que acabará rebosando sangre.

Podéis pensar que es sólo una película de acción con una trama truculenta por lo del secuestro del niño, ¿verdad? Pues no, porque resulta que el hombre al que tienen que asesinar está relacionado con ellos y la obsesión que tiene Seok Tae con él es repugnante.
A eso, por si ya no os echaba para atrás, añadidle que hay maltrato y otro tipo de horribles agresiones que creo que ya sabéis cuáles son cuando no las pongo por escrito, ¿verdad?

A ver, las interpretaciones, todas geniales, sobre todo Yeo Jin Goo y Choi Jin Woong.
Tengo que decir que sabía que el chaval no es que sea bueno, es que es lo siguiente. Aquí consiguió darles la réplica a todos sin problemas. Pero es que me sorprendió verlo en escenas de acción, y no se le dan nada mal, la verdad.

En cuanto a cómo acaba la peli… no os lo pienso contar, pero a mí me dejó con dudas, porque el final no está del todo cerrado.

NOTA: 7.
No le doy más porque me dejó muy mal cuerpo, y si eso pasa, da igual lo buena que pueda ser la película o el drama, que nota muy alta no conseguirán.