Hyung, capítulo 5. Heechul, aquel que es apreciado.

by @Jeannelok

Heechul, aquel que es apreciado

Después del encuentro con aquellas adolescentes alocadas, la vida de Ji Sang había vuelto a la normalidad. Las chicas todavía seguían yendo a las grabaciones donde aparecía su tan estimado oppa, y en cuanto su mirada se encontraba con la de ellas, las chispas saltaban y la retiraban enseguida, como si los ojos de una y otras quemasen. A pesar de lo que creyó al principio, aquella situación no le hastiaba: más bien le gustaba. Las grabaciones se hacían más amenas, era algo divertido. O, al menos, si lo veía así todo parecía mejor. El miedo y el odio iban desapareciendo, aunque de vez en cuando aún leía mensajes insultantes sobre ella. Bueno, se decía, como mínimo ahora soy capaz de enfrentarme totalmente a estas situaciones.

-¿De verdad puedo?-abrió mucho los ojos, con sorpresa. Había ido a otro concierto de Super Junior y lo había disfrutado muchísimo, pero la propuesta de Heechul la dejaba anonadada. El chico se encontraba allí delante de ella ofreciéndole el poder estar entre vestidores durante uno de los conciertos, hablando con sus compañeros y estableciendo amistad con ellos. Era algo realmente tentador, pero no podía creerlo y creía que era una broma de mal gusto.

-En serio, ¡de verdad! Además, ellos tienen ganas de conocerte. Creen que eres simpática.

-¿Sí?-se sonrojó, sorprendida. Si es gratificante saber que la gente lo alaba a uno, más es cuando se trata de gente que a su vez se admira.

-Sí, pero ya me ocuparé de que salgan de su error.

-Oh, ¡hyung! Te encanta romper el momento-él le acarició el cabello, como solía hacer y ella le agarró la mano en ese instante. Quedándose en aquella postura, lo miró fijamente a los ojos mientras hablaba- No te arrepientas, mañana me los presentarás a todos. Y podré ir a cenar con vosotros después.

-Da la mano y te comen el brazo…-murmuró entre dientes-¡Está bien, cumpliré tus deseos!

Él había cumplido su promesa. Ji Sang se encontraba rodeada por todos los miembros de Super Junior, que hablaban divertidos media hora antes de salir a cantar delante de millones de fans, mientras que ella sólo por estar delante de ellos sentía que iba a fallecer. Los chicos tenían ese brillo especial que rodea a las estrellas, gente nacida para triunfar en el mundo del espectáculo. Ella veía ese halo en ellos y le cortaba el aliento. Pero, igual que cuando miraba un concierto desde abajo, el que más resaltaba ante sus ojos era Heechul. Enfundado en ese traje imposible de color negro, presentándole a los miembros de su grupo, parecía un espejismo.

Por un momento, Ji Sang sintió la tristeza invadirla: a veces, lo sentía tan lejos a pesar de tenerlo frente a sus ojos…

-Hyung Heechul no suele traer a sus compañeras de grabación por aquí-comentó Donghae, sorprendiéndola por llamarlo hyung y arrancándole una sonrisa por eso-. Ah, ¿sonríes porque eres especial para él, no?-preguntó juguetón, guiñándole un ojo exageradamente para que todos lo viesen y estallasen en carcajadas. Ella le devolvió el gesto.

-Soy realmente especial para él, incluso me invitó a cenar.-se escucharon silbidos de admiración y de nuevo interrumpieron el ambiente entre risas, mientras Heechul se cruzaba de brazos enfuruñado.

-¡Hey, fue porque perdí la apuesta!-ella se encogió de hombros.

-Yo sólo he dicho que me invitaste. Pero no correré mucho la voz si no quiero que nuestros mánager nos encierren por mentirles.

-¿Un secreto de hyung Heechul? ¡Bien, ya sabemos qué usar en su contra!-rió Kangin, golpeando con el codo a Eunhyuk, quien se encontraba a su lado.

-No debería haberte traído.

-Soy especial para ti, no puedes evitarlo.-continuó bromeando ella, pero la respuesta de ella cortó todo síntoma de risa y le obligó a morderse la lengua para que la sangre no subiera demasiado deprisa a sus mejillas.

-Pero porque lo eres…me estás avergonzando todavía más.-y le dio la espalda, dispuesto a dirigirse al escenario mientras todos lo observaban marchar. La miraron a ellas, consternados, y después le dirigieron sendas sonrisas.

-¿Por qué siempre logra confundirme así?-murmuró, chasqueando la lengua-Chicos, espero que sobre todo, disfrutéis mucho allí arriba-quiso cambiar de tema antes de que ellos hicieran comentario alguno sobre lo acontecido hacia algunos segundos-, ¡fighting!

-¡Fighting!-dijeron todos antes de despedirse y marchar detrás de Heechul, aunque todavía quedaran varios minutos hasta del comienzo. Poco después, de cuclillas en el suelo y cubriéndose el rostro con las manos para ocultar su vergüenza, Ji Sang escuchó el rugir del público y la música resonó en el lugar.

Ella se mantuvo entre bastidores, dándoles palabras de ánimo cuando acudían a cambiarse beber algo de agua, y mientras los observaba desde el interior. Se notaba cuánto disfrutaban, a pesar del cansancio, y como las veces que los observaba desde las gradas tuvo celos y ganas de bailar y cantar con ellos. Eran como una droga que le hacían tener ganas de cosas que nunca creyó que iba a desear hacer y aquello la hacía feliz: era una adrenalina perturbadora.

-¿Estás disfrutando?-Donghae se estaba arreglando el micrófono que colgaba de su oreja. En aquellos momentos actuaban otros miembros mientras el subgrupo de Super Junior M se encontraba allí preparándose para su actuación. Ella sonrió y asintió ávidamente con la cabeza.

-Sois impresionantes. No tengo palabras más que de admiración para vosotros… ¿de verdad sois reales?-aquello arrancó una carcajada al muchacho. Su risa eran cantarina y contagiosa: realmente bonita.

– Heechul estaba en lo cierto, eres rara pero divertida.

-¿Heechul habla de mí?-Donghae se encogió de hombros.

-Claro. Al fin y al cabo…eres especial, ¿no?

-Ah. Bien, ¿qué significa exactamente que soy especial?-Donghae no respondió. Ya les tocaba a ellos, así pues le dirigió una enigmática sonrisa antes de dirigirse hacia el escenario, haciendo presencia momentos después el resto del grupo, entre ellos Heechul.

-¿Quieres salir al escenario?-preguntó nada más verla, y ella supo que su cara en aquellos momentos debió de ser muy cómica por cómo rieron los demás y sonrió él.

-¿Se puede saber qué llevan vuestras botellas?

-En serio, a veces aparece gente inesperada en los conciertos, ¿por qué no tú en este?

-¡Suelen ser otros cantantes! ¿Qué pinto yo en un escenario? Además, ¿quieres que las fans de Super Junior me linchen también?

-¿Sinigifca eso que estás pasándolo bien aquí atrás?

-¿Eh?…Oh…-comprendió, emocionada. Así era él. En vez de decirle que estaba preocupado por si sentía incómoda por encontrarse allí escondida para verles, decía cosas sinsentido- Estoy muy bien aquí

-Pero la propuesta sigue en pie.-comentó él, lanzando la toalla con la que se secaba lejos cuando les tocó volver a salir.

El concierto se le hizo muy corto pero confuso. Desde antes de que comenzara, las acciones y palabras de Heechul la habían confundido, y en aquellos momentos se encontraba flotando sobre una nube, que en cualquier momento podía deshacerse y así, hacerle caer. Lo sabía y por eso intentaba tener los pies en el suelo, sin dejarse emocionar e imaginar cosas extrañas, pero era tan difícil…

-¡Ha sido genial!-aplaudía con sentida energía. Era la que más se hacía notar entre todos quienes les felicitaban en la mesa donde se encontraban sentados para ponerse a cenar. Estaba emocionada y sentía las mejillas encendidas y los ojos vidriosos de pura emoción, como si hubiese bebido alcohol. Finalmente dejó de aplaudir y dejó caer las manos sobre la mesa, removiéndose en la silla pues quería dejar salir al exterior toda la emoción contenida.
-Has hecho bien en traerla, es gratificante sentir tan de cerca la emoción de las fans.-le comentó Leetuk a Heechul. Era cierto, pues por lo general o se mostraban demasiado tímidas como para decir palabras coherentes, o tan expresivas y emocionadas que a duras penas se podía entender lo que querían decir.

Puesto que el calor ya se estaba acercando, cenaban al aire libre en un bonito descampado donde a veces se hacían comidas y donde nadie sospecharía que se encontrarían para ir a buscarlos, imaginando que se encontrarían en algún hotel o restaurante. Habían hecho entre todos una especie de barbacoa y disfrutaban entre charlas de comida y bebida: parecía una típica reunión entre amigos. Ji Sang estaba disfrutando más de lo que nunca podría haber llegado a imaginar de aquel ambiente familiar. Les escuchaba hablar y reír y se sentía una más, aunque…hubiera deseado sentarse más cerca de Heechul. De vez en cuando la vista se escapaba hacia él, quien reía y bromeaba con los de su alrededor, disfrutaba de la comida, bebía… De nuevo sintió un peso golpearle el pecho, pues lo tenía al alcance de la mano pero su voz se iba haciendo cada vez más difusa, como si fuera a abandonarla.

-Voy a dar una vuelta.-sentenció, poniéndose de golpe en pie. Escuchó voces que gritaban su nombre, sin embargo no se detuvo hasta perderse entre la vegetación que crecía mejor y más fuerte un poco más allá del lugar. Quería perderse, alejarse del ruido que unos instantes antes tan emocionada le había hecho sentir, y plantearse por qué se sentía de aquella manera.

Se dejó caer contra el tronco de un árbol y cerró los ojos.

-Nos has sorprendido.

Se despertó de golpe, sentada sobre el duro suelo de tierra. Alzó los ojos y cuando se pudo acostumbrar a la oscuridad que la rodeaba, adivinó un rostro con los rasgos de uno de los compañeros de Heechul, aquel que parecía más interesado en ella.

-¿He dormido mucho?-preguntó a Donghae, quien respondió negando con la cabeza.

-No, pero tu repentina marcha fue extraña. He ido a…-se detuvo, preguntándose hasta qué punto sería educado decir aquello delante de una chica que a duras penas conocía.

-¿Mear?-inquirió ella. Sabía que por lo general, si hubiese dicho eso a otra muchacha ella hubiera exclamado “¡Oppa, qué dices!” o algo semejante y sonrió divertida por lo dulces que podían llegar a ser.

-Em, sí…y entonces te he visto. Por cierto, ¡date la vuelta que no me aguanto!- se levantó de repente, corriendo a esconderse un poco más allá. El sonido del agua repiquetear sobre el suelo hizo reír a Ji Sang- Argh…-escuchó al muchacho quejarse, avergonzado. Regresó restregándose las manos a ambos lados del pantalón- Ha sido muy raro, ¿no te ha dado cosa o vergüenza? Quiero decir…-ella negó con la cabeza.

-Envidio esa facilidad para hacer vuestras necesidades.

-Vale. Vamos a dejarlo ahí, ¡está conversación es extraña también!-y comenzaron a reír, sin embargo la risa de él se detuvo y dibujó una sonrisa misteriosa y provocativa en su rostro- Ji Sang, ya que veo que se puede ser sincero y directo contigo… ¿puedo decirte algo?

-¿Te gusto? Vale, no me mires así, era broma. Dime, dime.

-No te ofendas, ¿eh?-ella negó intrigada- A ti…te gusta Heechul, ¿verdad?-podría haber sido otra cosa, ¡cualquier otra! Pero no aquella que tanto la inquietaba y extraña la hacía sentir- Lo sabía, con tu cara me lo has dicho todo, no hace falta que respondas. Está bien, ¡me alegro mucho!

-¿Por qué te alegras?

-Porque pareces una buena chica y hyung se ve feliz cuando está contigo-se encogió de hombros-, por eso…quiero decirte algo. Hyung Heechul es alguien complicado, supongo que te habrás dado cuenta-ella asintió con la cabeza-, pero también es delicado. Parece fuerte, pero puede ser fácilmente herido. Él confía en ti. No es que lo haya dicho directamente, pero sus acciones le delatan. Por eso…confiaré también en ti y en que intentarás comprenderle.

-Hablas como si él también sintiera algo por mí…-estuvo tentada a preguntarle si era cierto, sin embargo no le hizo falta abrir la boca.

-No lo sé, no sé qué pasa por su cabeza. Y aunque lo supiera, él es el único con derecho a decirlo.-ella asintió, pensativa. Donghae era un buen chico, se notaba que apreciaba a Heechul. Extendió una mano hacia él para estrecharla.

-¿Has olvidado que vengo de…?-dejó la pregunta en el aire e hizo reír a la chica. Se levantaron ambos del suelo, dirigiéndose donde se encontraba la multitud. Heechul se acercó a ellos despacio, dirigiéndoles una mirada intrigada, ¿sentiría, aunque fuera, un mínimo de celos al verlos allí solos y juntos?

-Seguro que estaba durmiendo.-puntualizó, señalándola con la cabeza. Ella abrió la boca y la volvió a cerrar, mientras Donghae marchaba riendo y dejándolos allí de pie, a pocos metros de la cena. Ji Sang desvió la mirada y la colocó en el suelo, manteniendo los brazos a los lados del cuerpo con los puchos apretados, avergonzada.

¿Cómo podía Heechul conocerla tan bien?

-¿Estabas preocupado?-intentó sacar algún tema al ver que el silencio comenzaba a formarse entre ellos, obligándose a alzar el rostro. Heechul llevaba una pinza en el flequillo, despejando de esta manera su rostro iluminado tenuemente por la luna y a su espalda, por las luces a su espalda.

-No, no realmente. Es decir…sé que eres fuerte para que no te suceda nada por ahí sola…Pero me intrigaba tu reacción de antes. Igualmente, no hace falta que me expliques nada, has vuelto y estabas riendo, así que no hay nada por lo cual preocuparse.

-Hyung…yo…antes, la verdad es que…estaba triste. Yo…-sentía el calor de la emoción que la había embargado antes volver a ella. Ascendía desde la punta de los dedos de los pies hasta la raíz de sus cabellos, haciéndola estremecer. La sangre le hacía daño hasta en los oídos y el corazón le latía como si acabase de correr un maratón- Te veía y me sentía triste, porque te tenía delante pero… ¿sabes? A veces eres tan…lejano-sabía que sus secretos íntimos tenían todavía menos sentido si los declaraba en voz alta, no obstante Heechul la escuchaba atentamente, fijando en ella aquella mirada donde podía llegar a perderse-. Yo quiero, cada vez más, ser cercana a ti, convertirme de verdad en alguien especial. Hyung, he tenido muchos, ¡muchos amigos! Pero, no sé por qué, la relación que tengo contigo…siento que es…tan diferente…

-Te estás sonrojando-respondió él cuando ella terminó de hablar-. Estás muy mona avergonzada-agarró su rostro entre ambas manos-. Ya lo dije, tú eres alguien importante para mí, por lo tanto, eres especial, ¿por qué te cuesta tanto creerlo?

Las palabras, el contacto… Ji Sang sentía que era el momento, podía decirle lo que sentía, ¡era entonces o nunca! Abrió la boca, pero las palabras murieron en su boca.

No, estaba bien. Todavía no se sentía preparada, y sabía que todo aquello no significaba nada especial. No era tonta, no iba a arriesgarse de aquella manera. No era por el rechazo o la vergüenza en sí, podría soportarlo (o al menos eso creía ella)…Pero no quería romper el momento.

-Todavía tengo hambre-anunció, haciendo que él le soltara el rostro-, ¿me acompañas a terminar de cenar, hyung?

5 respuestas a Hyung, capítulo 5. Heechul, aquel que es apreciado.

  1. alexka dijo:

    jooooooooo….otro, otro, otro, otro….OTROOOOO!!… ^_^…

    Que buena historia!!…y Donghae…POR DIOS!…que dulzura de chico!!…^_^…

  2. Mercy dijo:

    esta genial…………………………………….
    como dice alexka … OTRO,OTRO…..
    @Jeannelok eres una fabulosa escritora ¡fighting!

  3. Patty Elsevyf dijo:

    Me Encanta esta Historia!!! Heechul uno de mis Favoritos tan Mono!!

  4. Maa dijo:

    Me encanta *-*
    Continuala pronto! 😀

  5. nubiia ^^ dijo:

    en serio es fascinante.. eres una excelente escritora narrando una historia, me emociono a cada momentoo como si estuviera viendo un dorama de ellos en serio y claro mucho mas porq se trata de heechul que me encanta… porfavor continua con la trama esta genial,,, se quedo super emocionante no nos dejes en suspenso por favor u.u eres grande te admiro @Jeannelok !! Figthing >w<

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